jueves, 9 de mayo de 2013

ARBOL MANZANO COLORADO


MANZANO COLORADO


MANZANO COLORADO - CLETHRA FIMBRIATA Árbol de las rocas y las montañas Esta especie es característica de laderas con suelos duros y rocosos, donde a menudo alcanza la talla de un arbolito de apenas 2 m de altura. En las montañas altas alrededor de la Sabana de Bogotá, este tipo de lugares suele estar cubierto con un matorral de tipo paramuno, dominado por especies como el frailejón (Espeletiopsis corymbosa), tagua (Gaiadendron punctatum), romero de páramo (Diplostephium rosmarinifolium), pegamosco (Bejaria resinosa) y otras plantas. El manzano colorado es otro de los arbolitos frecuentes en estos matorrales de subpáramo. En sitios con suelos más profundos, esta especie puede desarrollarse mucho más, alcanzando unos 15 metros de altura, y hace parte de la vegetación de los bosques altoandinos. La visita de moscas y abejorros Las flores del manzano colorado son blancas, pequeñas y están situadas en racimos al final de las ramas. Estas flores exhalan un olor muy perfumado y atraen numerosos polinizadores, principalmente abejorros (Bombus) y moscas de la familia Tachinidae. También son libadas por el colibrí Metallura tyrianthina. El falso “manzano” Al igual que muchos otros árboles nativos, esta especie carece de un nombre común que le sea propio y exclusivo. Con frecuencia ha sido llamado manzano, aunque no está emparentado ni se parece a un verdadero manzano (Malus). De hecho, sus frutos no son manzanas, sino pequeñas cápsulas secas que se abren por sí solas y liberan las semillas. ¡Nada que apetezca comer ni nada que se parezca a una jugosa manzana! Ficha técnica CLASIFICACIÓN Y NOMBRES Familia: Clethraceae Nombre científico: Clethra fimbriata Kunth Otros nombres comunes: Trompeto DIMENSIONES Altura máxima reportada: 15 m Diámetro máximo del tronco a la altura del pecho: 40 cm FAUNA ASOCIADA Flores visitadas por las siguientes especies: • Abejorro (Bombus sp.) • Moscas Tachinidae • Colibrí (Metallura tyrianthina) DISTRIBUCIÓN Andes de Colombia a Bolivia. En Colombia presente en la Sierra Nevada de Santa Marta y en las cordilleras Oriental y Central, entre 2000 y 3600 m. ESTADO DE CONSERVACIÓN No se la considera una especie amenazada. USOS • Madera usada como leña. • Con la madera se elabora carbón vegetal. • La madera puede ser usada en carpintería y ebanistería.

ARBOL SIETECUEROS


ARBOL SIETECUEROS


SIETECUEROS - TIBOUCHINA LEPIDOTA Joyas del bosque nublado Los sietecueros (Tibouchina) son unos de los árboles más ornamentales de los bosques andinos. Sus grandes y vistosas flores son de color violeta, a menudo con un tono algo más rojizo cuando recién despliegan sus pétalos. El dosel de un bosque andino lleno de sietecueros florecidos aparece salpicado aquí y allá con manchones morados, que le dan un aspecto sumamente atractivo. Este sietecueros es propio sobre todo de montañas húmedas y nubladas y se desarrolla en abundancia en lugares donde el bosque ha sido despejado o ha sufrido una perturbación en el pasado. En contraste con otras especies de árboles que colonizan claros y zonas abiertas, el sietecueros, a pesar de ser una especie pionera, es un árbol de lento crecimiento, que tarda mucho tiempo en alcanzar la plena madurez; un sietecueros antiguo alcanza unos 20 metros de altura y unos 80 cm de diámetro del tronco. En los jardines de fincas, pueblos y ciudades se pueden observar ejemplares mucho más pequeños, plantados allí aprovechando sus cualidades ornamentales. Hojas con ásperas escamas En los bosques colombianos hay otras especies de sietecueros y sus parientes (familia de las Melastomatáceas) con una floración tan vistosa como la de esta especie. Una característica que permite diferenciar a la Tibouchina lepidota de muchos otros parientes suyos es la textura de sus hojas. Si se les pasa un dedo, frotándolas por encima y por debajo, se podrá apreciar que son ásperas. Unas pequeñas y duras escamas que cubren las hojas son los que les confieren esta textura tan distintiva. En comparación, otras Melastomatáceas similares tienen hojas lisas o suavemente peludas. Las flores sin néctar Una de las características notables de las flores de este sietecueros es que éstas no producen néctar. A cambio, los estambres producen polen extra y éste es la recompensa para los polinizadores que vistan las flores. Abejas y abejorros silvestres llegan volando a las flores, se posan sobre los estambres y, mientras se agarran de ellos, hacen vibrar muy rápido sus alas para agitarlos y hacer que suelten su polen. Éste se lo llevan pegado al cuerpo y a las patas y lo depositan en su nido o colmena para emplearlo como alimento. Como dato curioso, podemos mencionar que otras especies de sietecueros del mismo género Tibouchina, que tienen flores de color rojo, sí producen néctar y son visitadas por colibríes. Ficha técnica CLASIFICACIÓN Y NOMBRES Familia: Melastomataceae Nombre científico: Tibouchina lepidota (Bonpl.) Baill. DIMENSIONES Altura máxima reportada: 20 m Diámetro máximo del tronco a la altura del pecho: 80 cm DISTRIBUCIÓN Andes desde Venezuela hasta Perú. En Colombia las tres cordilleras, entre 1200 y 3300 m.s.n.m. ESTADO DE CONSERVACIÓN No se la considera una especie amenazada. USOS • Un árbol sumamente ornamental, muy apropiado para parques y jardines. • La madera es empleada como leña. • Con su madera se hacen postes para cercas. • Madera empleada en construcciones.

ARBOL RODAMONTE


ARBOL RODAMONTE


RODAMONTE - ESCALLONIA MYRTILLOIDES El árbol del páramo El rodamonte es uno de los árboles que crece a mayor altura en las montañas andinas. Junto con otras especies, como los colorados (Polylepis), algunos encenillos (Weinmannia), tunos (Miconia), cucharos (Myrsine) y amargueros (Gynoxys), el rodamonte puede, en lugares protegidos, formar pequeños bosques hasta a 4000 metros de altura sobre el nivel del mar, como ocurre, por ejemplo, en la Sierra Nevada del Cocuy. También es típico observarlo creciendo en las zonas pantanosas de los páramos y en la zona de subpáramo (a unos 3200 metros de altura), donde viejos ejemplares de esta especie constituyen uno de los elementos más distintivos de los bosques de altura. Todos estos bosques con rodamontes ofrecen cobijo a numerosas especies de arbustos, hierbas y plantas epífitas como orquídeas y musgos, además de varias aves y otros animales, que encuentran aquí un refugio arbolado en las alturas. Silueta de bonsai La silueta del rodamonte es muy distintiva y permite que el árbol sea reconocido a buena distancia. Los retorcidos troncos y el follaje fino y muy apretado, dispuesto en capas planas, recuerdan en cierta manera la silueta de los bonsais japoneses. Gracias a esta apariencia tan ornamental, los rodamontes son ahora plantados con frecuencia en los jardines de clima frío. Hay que admitir que casi ninguno de estos ejemplares cultivados puede compararse en porte y grosor del tronco a uno de los viejos rodamontes silvestres, ya que se trata de árboles de muy lento crecimiento, que seguramente tardan siglos en adquirir tallas realmente impresionantes (para la alta montaña, claro está); un rodamonte maduro puede llegar a alcanzar unos 15 metros de altura y unos 40 cm de diámetro del tronco. Afortunadamente, aún jóvenes, los rodamontes son atractivos y presentan el follaje en capas que les confiere una apariencia tan ornamental. Flores y semillas El rodamonte produce sus flores debajo de las capas de follaje. Esto, sumado al color algo verdoso que tienen éstas, puede hacer que pasen desapercibidas si no se mira la planta con suficiente atención. Estas flores son visitadas por insectos. Luego de la polinización, se forman los frutos, que son pequeñas cápsulas secas, las cuales se abren por sí solas y liberan las numerosas semillas que guardan en su interior. Ficha técnica CLASIFICACIÓN Y NOMBRES Familia: Escalloniaceae Nombre científico: Escallonia myrtilloides L. f. Otros nombres comunes: Chilco, pagoda DIMENSIONES Altura máxima reportada: 15 m Diámetro máximo del tronco a la altura del pecho: 60 cm DISTRIBUCIÓN Montañas de Costa Rica y Panamá, Andes desde Venezuela hasta el norte de Argentina y Chile. En Colombia presente en la Sierra Nevada de Santa Marta y en las tres cordilleras, entre 2200 y 4100 m. ESTADO DE CONSERVACIÓN No se la considera una especie amenazada. Sin embargo, localmente son cada vez más escasos los ejemplares maduros debido a la tala de los montes altoandinos y al aprovechamiento de la madera de estos árboles de lento crecimiento. USOS • Con la madera se hacen postes de cercas. • La madera es muy apropiada para realizar tallas artesanales. • Árbol de silueta ornamental, apropiado para plantar en jardines y en lugares cercanos al agua. • El árbol sirve para conformar setos y cercas vivas en sitios húmedos.

ARBOL TÍBAR


ARBOL TÍBAR


TÍBAR - ESCALLONIA PANICULATA Un árbol de cuento Los viejos tíbares parecen árboles sacados de un cuento de hadas. Troncos gruesos e inclinados evocan vejez y sabiduría. Las ramas que se extienden y retuercen en distintas direcciones, abiertas como los brazos y manos de un árbol fantástico. Espesas pelambres de musgos, bromeliáceas y orquídeas cubren las ramas. La imagen se ve reforzada cuando crecen juntos varios de estos árboles, cada uno con su forma propia, distinta de la de los demás. Uno de estos tíbares plenamente maduros puede alcanzar una talla de 15 metros de altura y 80 cm de diámetro del tronco. Se trata de árboles longevos y normalmente los ejemplares que observamos suelen ser menores. Tíbares en los bosques Los tíbares son típicos habitantes de los bosques andinos húmedos. Normalmente se los observa creciendo en baja densidad, mezclados con otras especies como encenillos, cedros, raques, coronos, chuques y otros árboles. En algunas partes, los tíbares pueden ser mucho más comunes y llegar a ser dominantes en los relictos de bosques de montaña. Cerca de Bogotá, uno de los lugares con más tíbares son los alrededores de La Pradera (Subachoque). Aquí, en algunos sitios, es posible observar decenas de viejos y retorcidos tíbares creciendo uno al lado del otro, destacándose desde lejos su denso follaje verde claro y los troncos con corteza rojiza. La corteza y las epífitas La corteza de los tíbares es muy característica, pues tiene una textura fibrosa y se desprende en largas tiras. La rugosa corteza de los árboles viejos constituye un sustrato muy apropiado para el enraizamiento de muchas plantas epífitas, incluyendo líquenes, musgos, helechos, bromeliáceas y orquídeas. Todas estas plantas juntas llegan a formar densos y hermosos jardines sobre las gruesas ramas de estos árboles. Ficha técnica CLASIFICACIÓN Y NOMBRES Familia: Escalloniaceae Nombre científico: Escallonia paniculata (Ruiz & Pav.) Roem. & Schult. Sinónimo: Escallonia floribunda Kunth Otros nombres comunes: Tobo DIMENSIONES Altura máxima reportada: 15 m Diámetro máximo del tronco a la altura del pecho: 80 cm FENOLOGÍA Floración: Desde septiembre hasta diciembre. FAUNA ASOCIADA Flores libadas por las siguientes especies: • Abeja doméstica (Apis mellifera) • Moscas (Diptera, por ejemplo especies de la familia Tachinidae) DISTRIBUCIÓN Montañas de Costa Rica y Panamá y Andes desde Venezuela hasta Bolivia. En Colombia la Sierra Nevada de Santa Marta y las tres cordilleras, entre 1700 y 3300 m. ESTADO DE CONSERVACIÓN No se la considera una especie amenazada. USOS • La madera es empleada como leña y de ella también se obtiene carbón. • Con su madera se hacen postes para cercas. • Con la madera se hacen artesanías, por ejemplo trompos y cucharones. • Madera usada para elaborar yugos para bueyes. • El árbol ayuda a la conservación de las cuencas hidrográficas. • Es una especie ornamental que puede ser plantada en parques y jardines.